Frederique Lengaigne ahora es directora de documentales, pero en 1992 trabajaba para la agencia Reuters en Moscú, fotografiando el colapso de la Unión Soviética. Con el estallido de los combates en Nagorno-Karabaj, ella viajó a Azerbaiyán y estuvo en Aghdam a finales de febrero.
Presenció y registró la afluencia de cadáveres y refugiados de la ciudad de Joyalí, después de la noche más sangrienta de la guerra y durante la cual 613 hombres, mujeres, niños y bebés fueron asesinados; aún se desconoce el destino de otras 150 personas.
El "New York Times", en su artículo de “Masacre cometida por armenios", del 3 de marzo de 1992, cita los relatos de Frederique diciendo que cerca de Aghdam ella vio dos camiones llenos de cadáveres de azerbaiyanos. El artículo cita su relato:
Presenció y registró la afluencia de cadáveres y refugiados de la ciudad de Joyalí, después de la noche más sangrienta de la guerra y durante la cual 613 hombres, mujeres, niños y bebés fueron asesinados; aún se desconoce el destino de otras 150 personas.
El "New York Times", en su artículo de “Masacre cometida por armenios", del 3 de marzo de 1992, cita los relatos de Frederique diciendo que cerca de Aghdam ella vio dos camiones llenos de cadáveres de azerbaiyanos. El artículo cita su relato:
"En el primer camión conté 35, y parecía que había otros tantos en el segundo”, dijo. “A algunos les cortaron la cabeza y a muchos los quemaron. Todos eran hombres, y algunos vestían uniformes caqui".